Torta de almendras

Una deliciosa torta de almendras que no os podéis perder, facilísima de hacer, deliciosa y con un sabor espectacular.

Sin ninguna duda un postre pensado para los más golosos con un sabor único a almendras que seguro que será un éxito asegurado.

Esta receta la saqué del fabuloso libro de recetas Cuchara de plata.

Ingredientes:

115 gramos de mantequilla a punto de pomada y 
    un poco más para engrasar.

120 gramos de almendras peladas y picadas.

4 yemas de huevo.

250 gramos de azúcar blanca normal.

50 gramos de harina.

50 gramos de fécula de patata (yo la compro en el herbolario).

2 cucharadas de licor de naranja (yo usé cointreau).

azúcar glas tamizado para espolvorear.

Preparación:

1. Precalentar el horno a 180º. Engrasar un molde desmontable de 20 cm de diámetro con matequilla y esparcir 2 cucharadas de almendra picada, repartiéndola por el molde.

2. En un bol, batir las yemas de huevo con el azúcar. Incorporar la harina, la fécula, el resto de la almendra, el licor de naranja y la mantequilla y mezclarlo todo bien. 

3. A continuación, pasar la preparación al molde engrasado y hornear la tarta unos 40 minutos.Ya sabeis que antes de sacarla la podeis pinchar con una aguja gorda o un pincho para ver si está hecha por dentro. Pasarla a una rejilla metálica y dejarla enfriar. Una vez fría desmoldar. Espolvorear la superficie de la tarta con abundante azúcar glas.

Mantecados caseros

Tengo el bonito recuerdo de estar en el pueblo de mi padre en casa de mi tía Consuelo cuando era pequeña. Recuerdo un comedor en una planta de arriba con una mesa redonda. 

Antes de volvernos del pueblo a Madrid de regreso de nuestras vacaciones nos pasábamos a despedirnos de ella y siempre nos sacaba un plato con chorizo y salchichón casero y luego un plato con sus riquísimos mantecados. Recuerdo el olor agradable y lo muchísimo que nos gustaban tanto a mis padres como a mis hermanos.

 Mi tía falleció y un día por casualidad buscando entre las recetas que tenía de mis padres encontré su receta del puño y letra de mi padre. El se la pidió y la guardó aunque nunca nadie los hizo y ahora en recuerdo a mi tía y a mis padres que les encantaban sus mantecados los publico para que todos sepáis lo deliciosos y lo fáciles de hacer que son.

Por eso os animo a que los probéis para estas navidades. Yo los he espolvoreado con azúcar y canela como ella pero podéis espolvorearlos con azúcar glass si queréis que también quedan muy ricos y quizás más navideños.

La receta viene con las medidas de una taza. Yo he usado una taza de café con leche. Las medidas para que os hagáis una idea son sobre unos 7 cm de ancho y casi 7 cm de altura pero si no es exactamente igual no pasa nada porque de la misma capacidad de vuestra taza echareis los otros ingredientes.

Ingredientes:

1 taza de aceite de girasol.

1 taza de manteca de cerdo.

1/2 taza de vino blanco.

1 taza de azúcar blanco (no la llenéis hasta el ras, yo le quité un dedo para que no estén tampoco demasiado dulces).

harina la que le pida(aproximadamente 1 kilo). Tenéis que ir echando hasta que veáis que la masa no se os pega en las manos y no queda muy compacta tampoco. Es muy fácil y un truco consiste en ir echando la harina poco a poco porque si nos pasamos luego no hay vuelta atrás. Ir echándola por puñados.

1 cucharada de canela (esta no estaba en la receta pero yo se la añadí porque me parece que las da un gusto muy bueno).

azúcar y canela para espolvorear o azúcar glass según queráis.

Preparación:

1. Derretir la manteca en el microondas en la función de descongelar.

2. En un bol grande echar la manteca derretida, el aceite y el azúcar y batir bien para que se disuelva el azúcar. 

3. Añadir el vino blanco y remover.

4. Ir añadiendo puñados de harina hasta que veamos que se nos va haciendo una masa compacta y cuando la podamos trabajar con las manos ir añadiendo harina si hace falta hasta que no se nos pegue en las manos.

5. Cuando ya tengamos una masa manejable y bien amasada la dejamos en forma de bola y vamos cogiendo trocitos y con ayuda de un rodillo los amasamos y dejando un centímetro y medio de grosor aproximadamente de ancho con ayuda de un cortapastas vamos haciendo nuestros mantecados. Antes de meterlos en el horno los espolvorearemos con azúcar y canela. Si los preferis espolvorear con azúcar glass entonces lo hareis cuando ya los hayais sacado del horno y estén fríos.

6. Forramos la bandeja de horno con un papel vegetal y vamos colocando los mantecados separados un poquito uno del otro. Precalentamos el horno a 180º y cuando esté caliente metemos los mantecados a esa temperatura arriba y abajo unos 15 minutos pero tener mucho cuidado y seguir estos pasos.
Pondremos la bandeja a la mitad de las alturas. Cuando hayan pasado unos 10 minutos aproximadamente y veamos que ya se han dorado por abajo, con ayuda de unos trapos para no quemarnos subimos la bandeja arriba y ponemos la temperatura sólo arriba. Los dejaremos unos 5 minutos más o hasta que estén con un poquito de color por arriba. 
El tiempo es a ojo y tenéis que estar pendientes del horno e ir mirando. No han de quedar muy tostados pues entonces quedarán duros, esto es muy importante, pero tampoco que queden crudos por dentro.

Galletas decoradas de Yolanda Martín

No os podeis imaginar la ilusión que me hizo cuando abrí el paquete que me llegó de Yolanda Martín y vi la preciosidad de galletas que me había preparado. Os prometo que se me hizo un nudo en la garganta de la emoción, ella las había preparado para mí, había perdido su tiempo en hacerlas y en enviármelas y es que son tan tan bonitas que no podía dejar de mirarlas. 

Hace ya tiempo que la conozco por el facebook además de ser una persona encantadora y maravillosa es una artista, aunque ella diga que soy una exagerada, jejejeje... en realidad no lo soy, juzgar por vosotros mismos y vereis que llevo razón...

Mil gracias Yolanda, nunca olvidaré este gesto tan bonito...

Palmeritas de hojaldre paso a paso, facilísimas y deliciosas

Estas riquísimas palmeritas se preparan en menos de 5 minutos y son realmente deliciosas recién horneadas. El hojaldre crujiente junto con el azúcar caramelizado hace a estas palmeritas un postre único que gustara a todo el mundo sin ninguna duda.

Son tan fáciles de hacer que las podréis preparar con vuestros pequeños disfrutando de un momento inolvidable junto a ellos.

Para los que nunca las habéis hecho os pongo el paso a paso para que veáis que sencillas son de hacer.
Venga, todo el mundo a comprar hojaldre¡¡¡¡

Ingredientes:

1 paquete de hojaldre fresco mejor si viene en forma rectangular. Yo uso el de la marca Lidl y os puedo asegurar que es una verdadera delicia, es exquisito y muy económico.

azúcar blanco.

Preparación paso a paso:

1. Espolvoreamos la mesa de trabajo bien con azúcar. Abrimos el paquete de hojaldre y sacamos el rectángulo de masa. Lo ponemos encima del azúcar sobre la mesa de trabajo y con ayuda de un rodillo estiramos un poco con el fin de que el azúcar se incruste en la masa.

2. Echamos bien de azúcar por encima de la masa y con el rodillo repetimos la misma operación que antes. Tener cuidado, hay que estirar un poquito la masa pero muy poquito, sólo para que se incruste el azúcar, porque si nos queda muy fina la masa luego será difícil de trabajarla y quedarán peor nuestras palmeritas.

3. Hacemos nuestro primer doblez a la masa y le damos un pelín con el rodillo.

4. Hacemos el segundo doblez y apretamos de nuevo.

5. Y ahora nos toca el último doblez. En este paso no hay que apretar la masa, tan sólo colocarla un poquito con las manos.

6. Con ayuda de un cuchillo y con cortes firmes y rápidos vamos haciendo nuestras palmeritas.

7. Usamos el mismo papel vegetal que viene en el paquete del hojaldre y lo ponemos en nuestra bandeja de horno. Sobre ella iremos colocando las palmeritas bien separadas entre ellas poque al cocerse crecerán y luego se nos pueden pegar unas con otras. Las metemos en el horno a una temperatura de 180º a temperatura arriba y abajo.

8. Cuando veamos que se han dorado por abajo, con ayuda de dos tenedores las damos la vuelta y las dejamos otro ratito hasta que se doren por los dos lados. Igualmente hay que poner todo el tiempo el horno con la temperatura arriba y abajo.

Delicia de chocolate

El mejor pastel de chocolate del mundo. Ya cuando lo vi en mi nuevo libro de recetas "La cuchara de plata" me dejó con la boca abierta pero cuando lo hice nunca pensé que pudiese estar tan delicioso... 
Al comerlo parece que se funde en la boca como si de una mousse se tratase sin serlo, una textura suave y con un sabor a chocolate inigualable.
Ya lo he hecho en varias ocasiones y a todo el mundo le ha encantado. Es muy fácil de hacer y tengo la total seguridad que va entusiasmar a todo el mundo que le guste el chocolate.
Os animáis a probarlo???

Ingredientes:

50 gramos de mantequilla fundida, y un poco más para engrasar.

25 gramos de harina.

100 gramos de chocolate negro troceado. (yo usé negro para postres).

5 huevos, con las yemas y las claras separadas.

200 gramos de azúcar glass.

25 gramos de azúcar avainillado.

20 gramos de fécula de maiz (yo usé maizena).

Preparación:

1. Precalentar el horno a 180º.

2. Engrasa un molde desmontable de unos 17 o 18 centímetros. En la receta usan uno de 20 cm y también podéis usarlo, pero a mí me gusta usarlo un poco más pequeño porque queda más alto el bizcocho pero está a vuestra elección.

3. Fundir el chocolate al baño maría. Yo usé un truco que es poner el microondas al modo descongelar y meter ahí el chocolate en un cuenco apto para el microondas y tenerlo un ratito hasta que quede fundido. Es muy  buen truco porque se hace en menos tiempo pero tenéis que tener cuidado e ir mirándolo para que no se os queme.

4. En un bol, batir las yemas de huevo con la mitad de los azúcares. Incorporar la mantequilla fundida y el chocolate fundido. Remover bien. Tamizar bien la harina y la fécula por encima y mezclarlo todo bien.

5. En un bol seco, montar las claras de huevo a punto de nieve e incorporar el resto de los azúcares. Es muy importante este paso y que quede bien montada, tener paciencia y batir bien.

6. Echarlas poco a poco en la mezcla de chocolate y pasarlo al molde engrasado o forrado con papel vegetal. Hornear la delicia unos 40 o 45 minutos, retirar del horno y dejar enfriar. Refrigerar antes de desmoldarla y servirla.